Amamantada por una loba,cual Cástor y Pólux desamparada,
en jauría de lobos me crié,
guerra de supervivencia constante,sin fin,ni verdad,
dolor agudo que se abre paso en mi carne,
para mi espíritu romper.
Arrollada siempre en un choque rudo,
detenida en el silencio,muda,pobre y desnuda,
jirones de mi extinta piel que ni el paso del inexorable tiempo cura.
Dentro del pecho guardo escondido,
el escudo protector de vencedor y vencido
Sin temor de cualquier final emergí del vacío,
desolada y triste,arrojada al lodo de mi destino fatal,
levantarse del pasado lacerada,
no es mas que tentar a ciegas el camino sin hallar.
Arder en enfermiza llama,
no es mas que fatigada,ansiosa, a solas clamar.
Desertora del amor sin recuerdos ni verdad,
suicida de los ojos negros, de las manos rotas,de los labios quietos,
despedazada mi carne,mi miseria contemplé.
Impenetrable,ausente,tierna y dulce,
calma y tempestad,
luz y sombra que del abismo emerge,para caer una ves mas.
En nadie confié
y si me preguntas ¿por qué?
es que en jauría de lobos me crié.
Roxana A.Beloglio
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